Las imprescindibles introducciones de Antonio Navarro, programador del Festival, nos adentraron en 'La anatomía de los caballos', donde la cámara escucha dos lenguas que se entrelazan: quechua y español, una fusión que convierte al idioma en protagonista y resalta la voz indígena, donde cada palabra refleja un choque de culturas, y poder. Daniel Vidal Toche, su director, explicaba acompañado en la rueda de prensa por el coguionista y productor Ignacio Vuelta, que del título fue escogido "porque el caballo es el animal de la conquista. Cuando llegó a América, se volvió importante a lo largo de todo el continente”.
El rodaje se adentra en alturas extremas de los Andes peruanos para mostrar un paisaje que no es bucólico sino desafiante. Para el director, filmar en quechua, lengua que no dominaba, fue un descubrimiento. Su desconocimiento le permitió mirar con otros ojos: “Salvo los españoles, todos eran quechua-hablantes, un lenguaje que es naturalmente poético, por lo que es muy difícil pedir a alguien que la interprete”.
El proyecto es fruto de una coproducción internacional entre España, Perú, Colombia y Francia, uniendo recursos, locaciones y equipos de distintos países para dar al relato escala y amplitud visual. La mirada audaz del director se posa en la inmensidad del altiplano andino, un meteorito cae sin previo aviso y abre una grieta en el tiempo.
“La película se plantea que es necesario pensar en una revolución, no sólo en un país tan encarnado como es Perú, con tantos problemas estructurales, sino a nivel global. Ha dejado de ser solamente problemática local.” Un laberinto temporal que alterna dos épocas, la rebelión anticolonial del siglo XVIII y el presente de una joven pastora que busca a su hermana desaparecida.
Que este universo tan complejo como deslumbrante que forma parte de nuestra Sección Oficial, siga cabalgando por festivales y sala desafiando las convenciones del tiempo.
Texto de © Beatriz Rodríguez Ruiz
