La bailaora Gloria del Rosario danzó al ritmo de una fusión de flamenco y barroco.

PInceladas de cultura sevillana para arropar la inauguración

Anoche se desplegó la alfombra roja en la Real Fábrica de Artillería para acoger el inicio de la vigésima edición del Festival de Sevilla. La maestra de ceremonias de esta especial inauguración, a la que acudieron 400 invitados del sector cinematográfico y cultural nacional e internacional, fue Concha Ortiz.

El acto arrancó con sendos parlamentos del coordinador del festival en este 2023, Manuel Cristobal, y el productor español Antonio Saura, miembro de la Academia de Cine Europeo (EFA). Tras sus intervenciones se dio paso a la entrega de los Giraldillos de Oro a la directora francesa Catherine Breillat y, de manera póstuma, al malogrado Juan Antonio Bermúdez, que ejerció de programador e impulsor de la sección Panorama Andaluz.

La delegada de Cultura reconoció el papel de Catherine Breillat al abrir el camino a otras mujeres directoras.

La delegada del área de Cultura y Deporte del Ayuntamiento de Sevilla, Minerva Salas, valoró la jornada como un día "para celebrar y darnos las gracias por el esfuerzo titánico en poner en marcha esta edición del festival". A continuación, alabó el papel de Catherine Breillat al abrir el camino a muchas mujeres directoras.

La realizadora francesa está acostumbrada a romper tabúes desde un ángulo femenino. Su cine está protagonizado por personajes que al ceder a sus impulsos y fantasías, desafían las apariencias, la banalidad y las normas sociales. La protagonista de su última película, El último verano, programada en la Sección Oficial, no es una excepción, y como sus antecesoras en la filmografía de Breillat intenta estar viva a toda costa, a riesgo de perderse en el camino y sufrir.

"Amo el cine de distracción, pero yo soy una cineasta de la emoción. El cine de distracción es necesario, pero es importante una ficción para la construcción del ser humano, para conocerse y reconocerse", distinguió la cineasta en su discurso de agradecimiento, donde reveló al respecto que una película de Ingmar Bergman fue la que le dio las ganas de hacer cine y Viridiana, de Luis Buñuel, la que la transformó como creadora.

El Giraldillo de Oro póstumo a Juan Antonio Bermúdez reconoció su vida dedicada al séptimo arte.

La madre de Juan Antonio Bermúdez, Carmen Bermúdez, fue la encargada de recoger el Giraldillo para su hijo de manos del alcalde, José Luis Sanz, en homenaje a toda una trayectoria entregada al séptimo arte. El mejor amigo del fallecido programador, poeta y docente, el dramaturgo y director de escena David Montero, leyó unas palabras en las que expresaba "la alegría por recibir este premio en el marco de este festival, su casa, y el dolor porque todavía se le echa de menos"

Tras este último reconocimiento, el alcalde agradeció al sector "el apoyo, reconocimiento y comprensión, imprescindibles para hacer posible esta edición del festival". Sanz avanzó que al término del aniversario, desde el consistorio se empezará de inmediato "a pensar en definir el festival para la próxima edición y acercar el cine a todos los rincones de la ciudad".

Una noche barroca y flamenca

La cita arrancó con el cuarteto de cuerda Totem Ensemble que acompañó a los invitados en su entrada a la ceremonia. A este aperitivo musical se unieron, punteadas a lo largo de la velada, pinceladas de la cultura sevillana donde los sonidos clásicos se alternaron con el flamenco. En el inicio hubo un recitado de un poema escrito ex profeso para la ocasión y música de tiorba.

A las notas interpretadas con este instrumento de cuerda del siglo XVI similar al laúd les tomaron el relevo Ángeles Nuñez y Aníbal Soriano, que transportaron a la audiencia a la época del Rey Sol con la interpretación de una popular melodía del Renacimiento y el Barroco, Une Jeune Fillette.

La cantaora Alba Carmona, acompañada por Jesús Guerrero a la guitarra.

La siguiente actuación fue la de la bailaora Gloria del Rosario, que danzó al ritmo de una fusión de flamenco y barroco, bajo la dirección grupal de la violagambista Johanna Rose. Les siguió la cantaora Alba Carmona, acompañada por Jesús Guerrero a la guitarra, que se llevó a su terreno estilístico la inolvidable canción de tango Volver. Como colofón, medio centenar de músicos de la banda de cornetas y tambores de Las Cigarreras de Sevilla arroparon a Gloria del Rosario en la interpretación de la marcha Sobre los pies te lleva Sevilla.