ACCIÓN

CINEASTAS ESPAÑOLES PASAN A LA ACCIÓN

El programa de actividades del Festival ha incluido una mesa redonda virtual protagonizada por la asociación de cineastas ACCIÓN, con intervenciones de Juan Vicente Córdoba, Javier Tolentino, Nathalie Martínez, Alberto Morais, Ana Rosa Diego, Pauline Durand y Václav Kadrnka

El Festival de Sevilla ha celebrado una mesa redonda virtual, en el marco del programa de actividades que ofrece estos días en su 17 edición. Se trataba de la primera jornada del ciclo titulado Basado en hechos reales, concebido para establecer diálogo y debate acerca de los retos y la reconstrucción del sector cinematográfico. En este caso ha estado protagonizada por algunos de los socios de ACCIÓN, una asociación de directores y directoras de cine nacida en octubre de 2018 con el fin de representar a este colectivo dentro de la industria cinematográfica y audiovisual española, y que también ha participado este año en el programa de SEFF Educación. Entre sus fines se encuentra el de colaborar con las administraciones en el diseño de las leyes y subvenciones al cine, y al audiovisual en general, para conseguir una cinematografía de calidad y diversa, tanto en contenidos y estilos como en formatos y espacios de exhibición.

En una mesa redonda bajo el nombre de Europa 21: Cómo seguir siendo cineasta hoy, retransmitida en directo a través del canal de YouTube del Festival, los representantes de ACCIÓN han reflexionado en torno a su situación en el complicado contexto actual. El encargado de moderar la sesión ha sido Floreal Peleato, director de documentales y conductor de los coloquios de cine en el Instituto Francés, quien ha lanzado el debate planteando la cuestión de cómo puede afectar la situación que estamos viviendo al sector, pero también a las historias que se filman. El guionista, productor, director y presidente de ACCIÓN Juan Vicente Córdoba ha comenzado con rotundidad: “La vocación del cineasta es tan poderosa (…) que ni cualquier pandemia realmente puede con nosotros. Desde ACCIÓN damos voz a los directores y hemos emprendido una campaña muy potente para que desde el ICAA se lidere la creación de un grupo de trabajo que inicie ese cambio de modelo que creemos tan necesario”.

Javier Tolentino, director del programa de Radio 3 El séptimo vicio, que ha dirigido su ópera prima Un blues para Teherán, ha comentado que se está viendo una intención de hacer cine “fuera de los formatos habituales, son proyectos de pequeño formato que están contando vidas cotidianas. Creo que esta situación va a revolucionarlo todo, no solo la forma de plantear las películas, las historias, sino también cómo contarlas, difundirlas, distribuirlas… al margen de todo el dolor que estamos pasando”.

La productora de cine de animación Nathalie Martínez opina que afectará no solo a la parte práctica del oficio, sino incluso desde el punto de vista reflexivo, aunque su especialidad “permite el teletrabajo mucho mejor que un rodaje tradicional con actores. Nuestro contenido se desarrolla con unos y ceros, así que podemos seguir creando cualquier tipo de historia, desde las grandilocuentes hasta las más personales y mínima”. Lo que sí está cambiando, para Martínez, es la mirada del espectador: “Lo que estamos viviendo nos condiciona, sobre todo a las generaciones jóvenes, que son los espectadores del futuro inmediato; ha variado la forma en que perciben las relaciones humanas y, por tanto, las historias que van a querer ver”.

Basado en hechos reales

 

Alberto Morais (Las olas, Los chicos del puerto), cineasta que ha competido en el Festival de Sevilla en más de una ocasión, ha comparado la actual coyuntura con los efectos de la II Guerra Mundial: “Es la destrucción del concepto que teníamos hasta ahora de cómo funcionan las cosas. La figura del director-productor en España ha desaparecido, en virtud de una hiperindustrialización de las ayudas que tanto se necesitan en el cine. Estas han sido captadas por las grandes televisiones y productoras, con lo cual, los directores-productores desaparecen porque no tienen capacidad económica para sostener una producción”.

La directora y presidenta de AAMMA, Asociación Andaluza de Mujeres de los Medios Audiovisuales, Ana Rosa Diego, ha expresado que son “la pasión y las ganas” los elementos que van a hacer que se siga haciendo cine en nuestro país: “Creo que vamos a tener que seguir agudizando el ingenio, no nos va a quedar otra. Hay que luchar por el bienestar y pedirle a las administraciones que nos escuchen y que hagan cambios”. Además ha hecho especial hincapié en la reducción de la brecha de género en el sector cinematográfico: “Tenemos que pelear para que nuestras voces realmente lleguen y no queden silenciadas, como ha pasado durante tantos siglos”.

A continuación ha intervenido Pauline Durand, directora general de la Fédération Européenne des Réalisateurs de l’Audiovisuel (FERA), analizando las inquietudes y necesidades comunes en los directores procedentes de diversos países europeos: “Ha habido un gran aumento del desempleo por el confinamiento, y además no han podido poner en marcha sus destrezas creativas. Rodar de forma presencial no es nada fácil, al menos en un futuro previsible y a corto plazo, y por tanto la vuelta a los rodajes va a estar sometida a presión económica y de tiempo. Aquellos proyectos creativos que son más pequeños, que toman menos riesgos, quizá tengan más posibilidades de sobrevivir”.

Finalmente, el director checo Václav Kadrnka (ganador en Karlovy Vary con su anterior Little Crusader), que finalizó el rodaje de su nuevo film a finales de mayo, ha aportado su propia experiencia en este contexto: “Nuestro único objetivo era reanudar el rodaje, intentar animar al equipo, y era complicado porque todos teníamos miedo”. Afortunadamente, todo acabó bien y ahora la película se encuentra en fase de posproducción. “En República Checa, actualmente, se están llevando a cabo muchos proyectos nacionales, ya que se considera que el rodaje de proyectos audiovisuales es un trabajo esencial”, ha señalado, dejando un poso de esperanza en la conclusión de esta mesa redonda virtual.