TOMORROW IS ALWAYS TOO LONG
V.O. en inglés subtitulada en español
![TOMORROW IS ALWAYS TOO LONG](/sites/default/files/styles/horizontal/public/2019-10/tomorrow.jpg?itok=MpPK4oeG)
Auténtica sinfonía de una ciudad (en este caso, Glasgow), musical de clase obrera protagonizado por gente de la calle que incorpora material documental, animaciones y hasta anuncios televisivos de astrólogos, y nos presenta inusitados números musicales que suceden en sitios tan dispares como una maternidad, una cárcel, una escuela y un geriátrico. Un caleidoscópico film, poético y lúdico, firmado por el ganador del Premio Turner Phil Collins (no confundir con el cantante caído en desgracia) y con canciones de la estrella pop galesa Cate Le Bon acompañadas por la Royal Scottish National Orchestra.
Dirección: Phil Collins
Guion: Phil Collins, Ewan Morrison
Fotografía: Michael McDonough
Montaje: Cristovao dos Reis, Casey Raymond
Música: Barry Burns, Cate Le Bon, Golden Teacher, Royal Scottish National Orchestra
Sonido:Jochen Jezussek
Producción: Sinisa Mitrovic
Compañía Productora: Shady Lane Productions
MELODÍAS EXCÉNTRICAS
A menudo se considera al musical como un género eminentemente norteamericano, con la única excepción de Jacques Demy (que estás en los cielos). Y aunque sin duda Demy modificó el devenir del género, aportando insólitas dosis de creatividad, el maestro francés no está solo: desde finales de los sesenta, un grupo de variopintos cineastas europeos se embarcaron en rompedoras incursiones en el musical, e incluso con la llegada del siglo XXI, el género ha resistido incluso el impacto del videoclip y de Youtube, ofreciendo interpretaciones heterodoxas de la mano de nuevos talentos. He aquí una muestra de las joyas de la corona de esa corriente colorida, estimulante y vital que es el musical europeo, cada una rompiendo de manera diferente con la línea establecida por Demy o por la clásicas películas sobre triunfales bandas de rock o pop, ya sea por la fragmentación de sus estructuras narrativas, sus fusiones de elementos de Hollywood con los de la Nouvelle Vague, sus corrosivas y transgresoras radiografías sociales, o por sus originales relecturas de mitos. Abarcando un amplio espectro temporal (de los sesenta hasta la actualidad) y geográfico (de Escocia hasta Portugal, pasando por el Báltico y el Mediterráneo), un puñado de títulos que inyectaron excentricidad e innovación al musical, demostrando que ha sido precisamente en Europa donde se han producido algunas de las muestras más extravagantes y visionarias del género.