Justine Triet
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Un juego psicológico de Justine Triet

La directora Justine Triet (París, 1978) regresa al Festival de Sevilla con el estreno en España de El reflejo de Sibyl’, tras proyección de sus anteriores filmes, 'Los casos de Victoria' y 'La batalla de Solferino'. En esta ocasión, compite en Sección Oficial con esta historia sobre una psicoanalista que regresa a su vocación primera, la escritura. “El argumento se acerca a un personaje que más que víctima de sus problemas, es alguien que los resuelve metiéndose en ellos”. Esa idea de resistencia es la que alberga la esperanza, porque lo complicado es “mantenerse en pie cuando todo se desmorona”, ha indicado la directora francesa.

Margot, el personaje que desata todo este cambio, está encarnada por Adèle Exarchopoulos, conocida por sus papeles en ‘La vida de Adèle’ (Abdellatif Kechiche, 2013) o ‘The White Crow’ (Ralph Fiennes, 2018). La directora ha afirmado que "en Francia es problemático hacer un casting con actores conocidos. Propuse el papel de Adèle a una mujer más mayor y no quiso. A Adèle la elegí porque fue excepcional en la escena en la que dice que hay algo sucio en ella".

Adèle Exarchopoulos interpreta en este caso a una actriz desesperada cuya vida es, a ojos de su terapeuta (Virginie Efira), maná para la literatura. El encuentro entre estas dos mujeres pone a circular en pantalla cuestiones como los enredos sentimentales, la psicología, la ficción y el cine. En ese proceso de autosanación, la protagonista tiene que acudir a su pasado, pero Triet asegura que no se trata de flashbacks porque “aunque hay un odio de sí misma hacia su pasado, no está recordándolo sino descubriéndolo, lo que supone para ella una revelación”.

A Triet se le hace difícil hablar sobre la película, dado que el proceso de escritura fue algo complicado. Su idea era la de “ir de una ficción a otra. Arrancar con alguien que está escribiendo, pero cuando entra en acción se encuentra con algo artificial”. Sobre el proceso creativo, Triet afirma que no se plantea cuál es el uso de la comedia para contar historias trágicas.  “A mí me encanta contar comedia. Me gusta reírme de todo, pero también hay algo de pudor en eso", ha afirmado.

'El reflejo de Sibyl' es una película cinéfila que afrancesa al mejor Woody Allen, invoca a 'Eva al desnudo' y se recrea en 'Stromboli', poniendo en jaque como la manipulación y la traición. Para la autora, estos términos “no tienen siempre que valorarse desde el punto de visto moral, sino que en el cine se pueden tener en cuenta otras representaciones, como su sentido lúdico o de juego para sorprender al espectador”, porque “cuando pienso en mí como público lo que más me gusta es que me sorprendan”, ha concluido Triet.