El documental, que se estrena esta tarde en el Teatro Lope de Vega como cierre de la programación de Panorama Andaluz, ahonda en los orígenes de una de las figuras más importantes de la historia del toreo
Curro Sánchez Varela cuenta con Juan Echanove como narrador de este largometraje que reúne las voces de Joaquín Sabina, Andrés Calamaro o Carlos Herrera para dibujar el retrato de Faraón de Camas
Sevilla, 13 de noviembre de 2020.- La programación de la sección Panorama Andaluz de esta decimoctava edición se cierra con el estreno mundial de Curro Romero, maestro del tiempo, un documental que este sábado se presenta en el Teatro Lope de Vega como última proyección del Festival de Sevilla en este espacio.
Curro Sánchez Varela (Goya al Mejor Documental por Paco de Lucía: La búsqueda, sobre la vida y obra de su padre) aborda en este nuevo trabajo la figura de un artista universal que fraguó un antes y un después en la tauromaquia y se convirtió en referente y leyenda viva de la España del siglo XX. Su nombre, 20 años después de su retirada, tras aquella última corrida en La Algaba (Sevilla), sigue suscitando pasiones infinitas. Según ha explicado a los medios, Sánchez Varela se centra en “los momentos más impresionantes de su carrera como torero y poniendo el foco en su filosofía y trayectoria vital y en cómo ve la vida”. Para el director, “Curro Romero es una de las grandes figuras del siglo XX que trasciende al universo taurino y que, cada vez que habla, sentencia”.
Creada a partir de la idea original del productor José Carlos Conde, el largometraje muestra a Curro Romero en primera persona, hablando sobre todo lo que nunca quiso hablar, y contando todo lo que siempre quiso contar. Alberto García Reyes, que también es responsable de la producción ejecutiva, firma el guión de la película cuya singularidad y valor es “haber contado con su testimonio de una forma íntima, Curro es una persona muy introvertida, por lo que hay muy poco de él hablando en imágenes de archivo”, ha explicado el periodista en la presentación. En este sentido, García Reyes ha recordado cómo el rodaje se llevó a cabo “en un ambiente en el que tenía que el maestro tenía que olvidar que había cámaras. Curro, en privado, cuando ha visto la película ha dicho que no sabe cómo ha podido hablar tanto”.
El documental, con la producción de Womack Studios y la colaboración de Canal Sur y Mediaset, muestra la personalidad inédita y los pensamientos y sabiduría de Curro Romero a través de conversaciones mantenidas con él, pero también dibuja un universo único a través de la música y del arte. Un recorrido por su vida que irá descubriendo una sabiduría insólita en su forma de ver la vida y en su forma de entender al mundo, descubriendo así a un genio aún desconocido para muchos, y un gran filósofo de la palabra.
Sobre el tono de la película, Sánchez Varela ha explicado que su obsesión era “que el espíritu de Curro embullase el proyecto”, tanto es así que, según ha desvelado, “ha trabajado gente joven que al principio no tenían nada que ver con el mundo del toro y al término del proyecto se han definido como curristas”
Narrado en primera persona por el torero y por Juan Echanove, entre ambos desgranan distintos pasajes de la vida del torero: desde sus orígenes a su última faena en la plaza de toros de La Algaba, a punto de cumplir 67 años, en lo que, según los expertos ha sido una carrera plagada de éxitos sobre el albero y discreta fuera del coso taurino.
A la de Echanove, se unen las voces de personalidades de distintos ámbitos como Joaquín Sabina, Miquel Barceló, Andrés Calamaro, José María García, Carlos Herrera y Antonio Burgos, biógrafo del Faraón, entre otros, así como la colaboración de artistas del flamenco, por la especial relación que ha mantenido el diestro con esta expresión artística, así como grandes maestros de la tauromaquia de todos los tiempos.
Asimismo, la película, en la que el equipo lleva dos años de trabajo, se ha nutrido igualmente de abundante material de archivo inédito para bucear en la naturaleza del mito que acompaña a Curro Romero desde mitad del siglo XX y recrear el mundo taurino y la sociedad de aquella España en la que los toreros eran las auténticas estrellas de la cultura patria.
